Winter is Coming Un foro de rol basado en Game of Thrones. |
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| Sangre de mi sangre [el rey] | |
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Aedin Baratheon Casa Baratheon
Mensajes : 31 Fecha de inscripción : 15/10/2011
| Tema: Sangre de mi sangre [el rey] Vie Oct 21, 2011 12:41 am | |
| Salio de sus aposentos vistiendo un hermoso vestido de color oro y rojo escarlata, colores que no eran precisamente representativos de su casa pero la prenda le gustaba y ya de paso, si esa era su unica forma de manifestar su descontento, deberian concederle aunque mas no sea eso. Un Tyrell...por mas que intentaba alejar el pensamiento de su cabeza no podia y la frustraba de sobremanera. Como podia el destino de alguien, su vida, su felicidad, medirse simplemente por areglos nobiliarios? Y si la querian casada para asegurarse el poderio de la casa, por que entonces no concederle al menos el derecho de elegir? Bien, una cosa era segura, tenia que calmarse. Hecha un manojo de nervios y mal humor no lograria nada bueno, su hermano se enfadaria, las relaciones se romperian y ella terminaria de todos modos con el bendito Tyrell. Bajo las escaleras de los aposentos hacia la sala principal, sobre su rostro unos bucles se movian enmarcando delicadamente su rostro con cada paso que daba. Se reunio con su guardia, una de las pocas cosas que su padre le habia aconsejado al partir, es que nunca se despegara de ellos, a pesar de ser tan diferentes, evidentemente Rickard y Hally pensaban lo mismo en cuanto al rey y sus oidos, brazos, manos y espadas. Los hombres la rodearon y avanzaron con la nerviosa joven que detras de su rostro sereno y mirada amable comenzaba un plan para liberarse de los planes de su hermano y seguia sopesando la idea de salir corriendo. Un paso por vez Aedin, un paso por vez. Se recordo internamente mientras avanzaba con pasos deliberadamente lentos, como si puediera comprar el tiempo antes de enfrentarse a su sobrino, pero no fue lo suficiente y mucho menos de lo que a ella le hubiera gustado ya estaba alli, con las puertas desplegadas a los costados para que ella pudiera pasar a la sala donde ya podia ver al niñato. Sus consejeros estaban alli tambien, un hombre delgado de edad media y uno bajito y regordete. Una joven parada a su lado, no sabia si era su hermana o a quien deberia llamar reina y un despliegue de guardias reales, armados y listos a saltar sobre cualquiera que hiciera un movimiento inadecuado. En ese instante tuvo que admitir que agradecio las preocupaciones de su padre y hermanos. Llego frente al trono, con la cabeza herguida y semblante sereno. Ya frente a un muchacho que, o era muy pequeño o el trono le quedaba indiscutiblemente grande, hiso una reverencia de respeto que le retorcio las entrañas por dentro en un saludo solemne. Mi señor...
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| | | Admin Admin
Mensajes : 42 Fecha de inscripción : 06/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Vie Oct 21, 2011 1:17 am | |
| En la sala se encontraban una cantidad de personajes curiosos, entre ellos estaba la Guardia Real, claro está. Siete hombres que en su tiempo fueron representación de honor y justicia y que hoy, gracias al niño rey, habían sido vilipendiados hasta sus últimas consecuencias. Por suerte, no había sido capaz de deshacerse del Lord Comandante Ser Ignotus Selmy, el más grande caballero que hubiera conocido Westeros en el último siglo, probablemente. Descendiente directo de Barrestan “El Bravo”.
También estaban allí su araña personal, bajito y regordete, conocedor de todos los secretos y el hombre más peligroso de todo Desembarco del Rey por lo traicionero y manipulador que podía llegar a ser. Estaba también Ser Mortymer Lannister, Jefe de la Moneda, hijo menor de Tytos Lannister y el principal objetivo de Rickard Baratheon. Así como la joven reina, una mujer delgada y hermosa de aproximadamente veintisiete años y que había tenido a su hijo, el niño rey, a los quince. Lady Meridia Martell, calculadora, fría y peligrosa si se trataba de proteger a su hijo. Además del séquito de guardias reales había un número considerable de guardias Martell en la sala de trono. Ante Aedin se imponía el famoso Trono de Hierro.
-Lady Aedin Baratheon, tercera hija de Lord Holly Baratheon y tía del rey Brynden Baratheon, señor de los ándalos y de los primeros hombres, el primero de su nombre—anunció la araña, quien recibía el nombre de Tarec.
La reina no dio palabra alguna, el joven rey, el niño Brynden, indicó a su tía que se levantara.
-Mi querida tía—dijo en tono despreciativo—. Es bueno verte, veo que te has convertido en una señorita hermosa en toda forma y medida—contempló como si no fuera en absoluto cinco años menor que Aiden—. Es una lástima que no se nos permita casarnos entre nosotros, los Targaryen lo hacían, no tendría problema en dejar mi semilla en ti.
Ser Mortymer Lannister observó a su señor con aprehensión. El rey pareció darse cuenta.
-¿Por qué la cara larga, ser Mortymer? Un rey puede decir y hacer lo que se le antoje, ¿no es así, madre?
La reina exhaló, ligeramente humillada por la actitud de su hijo—Brynden, estás hablando con tu tia, sangre de tu sangre, y una persona a la que debes respeto, no te crié para ser un maleducado, discúlpate en este instante, presenta tus respetos e invítala a que se nos una en la cena de esta noche.
-No me parece que deba tener una actitud como esa ante la noticia de que su padre ha estado confabulando en mi contra.
El rey aprovechó la cara de estupefacción de su tía para comentar lo siguiente.
-¿Qué no lo sabías? Ha estado enviándose cartas con el norte, al parecer no le gustan mis políticas de gobierno. Interceptamos otro cuervo esta semana. Te parecerá interesante lo que tu padre tiene para decir…
Finalmente agregó— Ah, por cierto... No soy tu señor, soy tu REY.
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| | | Aedin Baratheon Casa Baratheon
Mensajes : 31 Fecha de inscripción : 15/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Vie Oct 21, 2011 12:53 pm | |
| Se levanto cuando el mocoso se lo indico. Era una sala amplia, fría, desprovista de todo que no fuera el trono y los perros seguidores del rey. Sintió un escalofrió correr por su columna, sin saber si se trataba de la frialdad del sitio o del miedo y nerviosismo por el rumbo que en unas horas su vida pareció tomar. Maldijo hacia sus adentros el momento en que decidió abandonar El Bastión, sabiendo que tarde o temprano echos como estos pasarían, enfrentar al rey no era mas que otro de los baches en su camino....y el camino hacia la puerta era lógicamente demasiado largo. Bien, al parecer de repente todos querían casarse con ella, aunque sea a la fuerza y a pesar de propia rebeldía y un poco de egocentrismo, debía admitir que la mirada del niño sobre ella le heló la sangre. Pero madre había hecho con la joven un excelente trabajo, aunque por dentro estuviera cayendose a pedazos, por fuera era un ejemplo que calma, seguridad y delicadeza. Sonrió dulcemente a su rey.
Por favor, acepte mis disculpas mi rey...
Inclino nuevamente la cabeza con respeto en cuanto se dirigió a el y luego clavo su mirada en el niño. Si los dioses en algún momento le concedieran un regalo, le encantaría tener al muy maldito y malcriado crió fuera del trono, espada en mano enfrentadose con ella como el hombre que no era y nunca llegaría a ser. Detrás del dulce azul de sus ojos lo midió con frialdad, centímetro a centímetro desde sus elegantes botas y atuendo hasta el cabello mas corto de su cabeza. Vio su arrogancia infundada no en su fuerza o inteligencia, sino en el poder que le confería tan solo un trono...y seria tan fácil simplemente arrancarle el corazón con el filo de sus espada.
..pero no comprendo a que se refiere usted con esto. Mi padre, si me lo permite, a penas si ha expresado palabra desde la triste muerte de mi hermano Glacius, que descanse en la gloria.
Su voz tranquila y su mirada sin titubeos, fingiendo a la perfección una nota de incertidumbre. Si sabia que su padre estaba completamente en contra de su política, si sabia que le encantara desayunar una mañana con la cabeza del niño mirándolo...solo la cabeza. Pero realmente era una sorpresa para ella que el hubiera estado enviando cuervos y haciendo movimientos con el Norte, realmente ella estaba preocupada por el desinterés de padre.
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| | | Meridia Martell-Baratheon Reina de los Siete Reinos
Mensajes : 14 Fecha de inscripción : 21/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Sáb Oct 22, 2011 11:07 pm | |
| Una audiencia era lo que su cuñada, Aedin, había pedido para con su hijo. La reina simplemente sonrió para sí misma cuando la noticia llegó a sus oídos por medio de los consejeros del rey. No le importaba Aedin en lo más absoluto, sin embargo, sabía que si ella necesitaba algo del rey se podría sacar algo más de la situación. Las cuestiones bélicas y sociales, los lazos de hermandad, eran algo que Brynden aún no manejaba del todo bien, pero para eso estaba la reina, para aconsejarle y mover las piezas del ajedrez de manera que el que mejor saliese de la circunstancia fuese su hijo. Nada más le importaba que sus intereses, lo que a Aedin o cualquier otro le pasara no era asunto suyo; aunque sabía que eran familia, tenía la certeza de que en algún momento alguno de ellos intentaría destronar a Brynden, cosa que no sucedería ni aunque ella pereciera.
Para esa reunión la reina había puesto sobre su cuerpo un fino y delicado vestido de seda color turquesa con adornos en oro que embellecía aún más su nívea piel; el cabello, negro cual la noche, estaba recogido en una especie de moño alto de donde caía el resto de su pesado cabello en ondas perfectamente peinadas. El atuendo era bellísimo, pero la presencia de Meridia aún la hacía verse más imponente, tal cual como la reina que era. Para tal acontecimiento, de perfecta naturaleza no común, estaban en el salón unos cuantos miembros importantes, como los consejeros, otros eran simples chismosos que deseaban ver qué deseaba la tía de su rey; la guardia real había sido puesta ahí por los riesgos que podrían presentarse, como un atentado para asesinar a su hijo.
Cuando la reina entró en la sala, los presentes mostraron el respeto debido y la solemnidad que se merecía. Se colocó a un lado de su hijo y posó una mano en su hombro, mostrando el apoyo y confidencia por los cuales estaba ahí.
Entonces se anunció la llegada de su cuñada. Meridia no hizo ningún gesto, mantuvo su rostro lleno de frialdad e indiferencia cuando vio a la joven cruzar las puertas y dirigirse a un lugar más cercano al rey. Brynden dio unas cuantas palabras hacia su tía, de las cuales todas le parecieron de mal gusto a la reina. Reprimió un gesto de desaprobación y se limitó a apretar la mandíbula para evitar cometer un acto de indiscreción, como darle un pellizco muy bien merecido a su hijo por decir tales vulgaridades. Tomó aire y exhaló, entonces le respondió a su hijo lo que debía y lo invitó a decirle a la joven Baratheon que los acompañara en la cena. Sí, posiblemente la reina lograría ganársela de una u otra manera y comenzar con una cena no era del todo mala idea.
La conversación pronto desembocó en la confirmación del complot que se tramaban los hermanos del difunto esposo de Meridia, noticia que sabía desde hace un tiempo. La oración con la que su hijo afirmó su poder la hizo hincharse de orgullo.
Aedin parecía o fingía no saber nada de la confabulación, lo cual no sorprendió a Meridia, después de todo, aceptarlo sería firmar su sentencia de muerte por traición a la corona. La reina sabía perfectamente que su cuñada mentía, pues se estaba metiendo en el área que manejaba ella con maestría: el engaño disimulado. Era como tratar de enseñarle a un carpintero experimentado a serruchar un pedazo de madera. Meridia no tardó en hablar.
— Perdona, querida cuñada, la actitud tan irrespetuosa que muestra mi hijo. Es muy impetuoso, se deja llevar por las ideas que tiene en la mente y suele no pensarlas antes de decirlas. — se llevó las manos a la espalda — No dudo de tu padre, la muerte de un hijo ha de ser la cosa más pesada que un ser humano podría soportar y por lo tanto te pido una disculpa en nombre de mi hijo por ofenderlo. Sin embargo, no estamos aquí para desenmascarar un acto de traición del cual no estamos seguros, sino para escuchar la petición por la cual has venido. — comentó con un tono mas frío de lo habitual. Las cuestiones de los cuervos que se habían estado divisando hacía un tiempo era una situación muy delicada que tenían que verse con la cabeza fría y las intenciones bien puestas. Estaba segura que querían destronar a Brynden, pero no estaba dispuesta a ventilar el asunto de una manera tan estúpida, por eso zanjó el tema. Ya hablaría con su hijo de ese asunto después.
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| | | Admin Admin
Mensajes : 42 Fecha de inscripción : 06/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Lun Oct 24, 2011 3:29 pm | |
| El rey Brynden observó a su tía con disgusto y desconfianza. Dio una señal a Ser Mortymer para que trajera la carta interceptada.
-Hemos estado de vigilando muy de cerca a su padre en estos últimos tiempos, no podrá negar que este es el sello de los Baratheon de Bastión de Tormentas—dijo el rey, mientras Ser Mortymer le mostraba el sello de la carta—Lea la carta, Ser Mortymer—indicó Brynden.
-“Querido Roland, te escribo en nombre mío y de mi amada esposa, señores de Bastión de Tormentas, para hacerte saber de las últimas políticas de nuestro nieto, Brynden, de las cuales prescindimos y negamos en todo momento. Sabido es que hace tiempo que la amistad que nos unía se ha ido perdiendo pero está aún el lazo entre nuestros hijos, quienes poseen una sólida amistad, dejando de lado la pérdida de mi amado hijo y nuestro amado rey, quiero hacer énfasis en una de las últimas bulas del septón por orden del mismísimo rey Brynden, en donde el Norte tendrá prohibido la adoración a los dioses antiguos, esto entrará en abolición e inmediatamente se dará paso a la construcción de septs para la adoración a los Siete de Valyria. Sé que esto puede causar efecto grave en vosotros, pero no es ni la cuarta parte de los cambios negativos que se están gestando desde la corona real. Sugiero discreción y análisis, debe hacerse algo.
Con estima: Lord Holly Baratheon, un viejo compañero”.
Ser Mortymer terminó de leer y llevó la carta al niño rey, quien la releyó y luego la tiró al suelo, con furia.
-No sé tú, querida tía, pero a esto lo llamamos traición. Ahora dime—empezó, ignorando a su madre por completo— ¿Estabas tú enterada de todo esto?—preguntó severamente.
Su respuesta podría ser la línea entre la vida y la muerte.
-Y por cierto, madre—indicó a la reina—. El rey soy yo, vos sos mi regente, tengo el poder de decidir lo que hago y lo que no. Espero esté claro.
Aquello había sido, quizás, demasiado.
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| | | Aedin Baratheon Casa Baratheon
Mensajes : 31 Fecha de inscripción : 15/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Lun Oct 24, 2011 4:53 pm | |
| Dedico tan solo un movimiento de su cabeza hacia su cuñada en respuesta. Estaba ansiosa por escuchar aquello de lo que habia sido acusado su padre y evidentemente todos creian que era de su conocimiento personal. Examino la carta que Ser Mortymer le mostrara y palidecio al darse cuenta que, efectivamente, eran los sellos de su casa pero..nada de aquello tenia sentido, ella misma habia vivido ese ultimo tiempo preocupada por el creciente desinteres de su padre ante los asuntos que atenian a su casa y su familia en general. Ella sabia del dolor tan grande que lo habia sumido en una profunda depresion con la muerte de su hijo, lo sabia de sus propios labios que le dijeran mas de una vez que ahora ella era todo cuanto tenia. Las mismas palabras fueron pronunciadas una vez mas con el desden y el veneno de la lengua del niño y entonces fue muy consciente de la delicada situacion en que aquellos hechos la ponian a ella y su familia. Pero no habia porque mentir porque..no habia nada real en todo aquello, no podia haberlo. Lo miro a los ojos con preocupacion y sorpresa en ellos. Su majestad...esos sellos corresponden a mi casa, no lo niego. Hablo con su voz firme pero con el semblante claramente confundido. Pero...mi padre, como le he dicho, ha caido en una depresion muy grande luego de la muerte de Glacyus. Yo misma he estado pidiendole en mas de una ocacion que por favor retome el interes por nuestra casa, por nuestra familia. Esto es...francamente una sorpresa. Observo la carta a los pies del precoz monarca como si fuera alguna especie de animal extraño que jamas en su vida viera. Nada de aquello tenia sentido para ella y sea lo que sea tampoco era bueno para su padre. Acaso cabia la posibilidad de que alguien en el Bastion se estuviera haciendo pasar por el? Su majestad..yo no tenia idea de esta carta, ni de estas..medidas y...creo que hay muchas cosas en Bastion de las tormentas que desconozco. No sabia que tan apropiado seria exponer frente al rey su miedo de que alguien estuviera tomando medidas drasticas en nombre de su padre, queria antes hablar sobre esto con Rickard y Thomas y necesitaba hacerlo pronto.
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| | | Meridia Martell-Baratheon Reina de los Siete Reinos
Mensajes : 14 Fecha de inscripción : 21/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Mar Oct 25, 2011 12:32 am | |
| Con cada palabra que salía de la pequeña boca de Brynden, la reina se sentía más avergonzada de la poca buena cabeza que tenía para tratar temas de tan delicados como lo era la traición por parte de la familia real. Aedin, fuera o no culpable por conspiración contra la corona, estaba ahí por otras razones y la boca floja de Brynden no dejaba trabajar ese asunto. Meridia se mantenía sin decir una palabra. Era parte del consejo, pero su periodo de reinado, donde su opinión y lo que ella quisiera eran una orden, había acabado para darle el lugar al niño que se sentaba en ese momento en el trono. El coraje y la impotencia provocaron que la reina se enterrara las uñas en las palmas de las manos, reprimiendo cualquier intento de reprimienda que pudiera ocurrírsele a su cabeza y que su cuerpo llevara a cabo. Escuchó, pero no hizo nada. Aquella falta de respeto de su hijo a su persona era algo que no podía permitir. Si él estaba ahí era por ella, no por él mismo. Se acercó al oído de su hijo para que nadie más la escuchara. — Claro, tu eres el rey, pero si no fuera por mi ya estarías muerto. ¿A caso crees que todos tus súbditos te adoran? Si es eso lo que piensas deberías salir un poco más o mirar a los que te rodean. Tu propia familia se está poniendo en contra tuya y aquí yo soy la única a la que le interesa que sigas en el trono, por el honor de tu padre y por el tuyo. Así que te sugiero que cuides lo que sale de tu boca, porque podrías matarte con ella misma. Se alejó con la mirada puesta en su cuñada. Una prueba viva de que no todos los Baratheon, sin mencionar que quizá todos, estaban esperando un movimiento en falso del rey para acabar con su vida. Como todos los demás presentes, Meridia se quedó observando todo aquél gesto que su cuñada hiciera para poder desvanecer, así, si en realidad no sabía nada o si sabía todo pero también mentir. Sus uñas, rojas por la sangre de sus palmas, se posaron sobre sus brazos cruzados. Por lo que veía, su cuñada no sabía nada al respecto de los cuervos, así que podía sacar a conclusión que la amenaza no era su suegro, sino alguien más que actuaba en su nombre. Un traidor anónimo y cobarde. Meridia pensaba llevar ese asunto al consejo. Si aquél que mandaba aquellas aves de plumaje negro no se enteraba o seguía pensando que la corte no tenía conocimiento alguno de estos acontecimientos, la indiscreción del remitente se haría aún más evidente, lo que les regalaría a los demás el paradero y la identificación de ese traidor y así sería más fácil mandarlo al crisol para cortarle la cabeza bajo cargos de traición. Sin embargo, su hijo quería llevar las cosas de distinta manera, y si debía aprender con el error, entonces Meridia no metería las manos en el fuego. Después de todo, con esas caídas, ella se ganaba la confianza de su hijo. | |
| | | Admin Admin
Mensajes : 42 Fecha de inscripción : 06/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Mar Oct 25, 2011 8:30 pm | |
| Brynden examinó a su tía con desasosiego, inconforme, finalmente exclamó.
-No sólo de tu casa, querida tía, de la mía también, ¿o es que acaso olvidas que yo también soy un Baratheon?—preguntó.
Se levantó.
-¡No me importa si cayó en una depresión o si sufre de demencia senil, lo que está haciendo es traición…! Al parecer ha retomado más que el interés…
Volvió a tomar asiento.
-Así que no, ¿eh?
Se acomodó en el Trono de Hierro o al menos lo intentó.
-Pues bien, demuéstralo, quiero que seas tú, enfrente de mí, quien de la orden de que tu padre sea tomado bajo arresto y traído a Desembarco del Rey para ser juzgado por sus crímenes. Lo harás aquí y ahora, enfrente de mi guardia real, de mi madre y mío. ¿Sabes qué? También tu madre, seguramente el germen ha hecho podrir a los Baratheon de Bastión de Tormentas. Sólo así confiaré en que tú y mis demás tíos no han tenido nada que ver.
El rey ignoró a su madre de una manera olímpica.
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| | | Aedin Baratheon Casa Baratheon
Mensajes : 31 Fecha de inscripción : 15/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Miér Oct 26, 2011 2:38 am | |
| Hay veces en la vida en que todo se reduce a un solo instante, ese que puede cambiar o incluso terminar tu vida. Observo al niño rey sin decir una palabra, directo a sus ojos e intento tragar saliva pero no pudo. Con las manos cerradas en dos puños a cada costado de su cuerpo, por primera vez en toda su entera vida se sintio fragil y pequeña, indefensa, aunque tuviera en su mano un arsenal completo de las mas equilibradas y afiladas espadas jamas fabricadas. Observo los movimientos de su cuñada, sin despegar su mirada en cuanto ella la observo y tambien fue consciente de la nula importancia que su sobrino le daba a sus palabras. Por una vez, el niñato deberia hacer caso a su madre y no al reves, enferma familia. Cerro los ojos con dolor e inspiro invocando interiormente a la calma que no sentia y necesitaba mas que nunca.
Su majestad, si me lo permite, yo creo que mi padre tampoco esta enterado de estos asuntos. Mucho menos mi madre que lamentaba junto a mi la depresion en la que lo ve sumido dia tras dia. Llamemos a la razon un momento y pensemos que si mi padre quisiera gobernar, o si mostrara un minimo interes por el rumbo del reino en general, el mismo hubiera aceptado la corona y estaria en estos momentos aqui. Pero fue su propia voluntad, sin obligacion de nadie, lo que lo ha hecho renunciar a sus derechos y privilegios. Esa es la principal razon por la cual me sorprende de sobremanera esta carta que usted me muestra y que certifico que, efectivamente, lleva nuestro sello.
Aflojo el apriete de sus puños y relajo un poco su postura, aunque se mantuvo en un estado de alerta generalizado. Por que el rey espero a su venida? por que no habia hablado de estos asuntos con alguno de sus hermanos? era claro que pretendia atacar un punto que el creyera mas vulnerable. Inspiro profundamente y dulcifico el gesto en su mirada, creia que conmoverlo era la ultima cosa que lograria en este mocoso malcriado, pero necesitaba llamar a toda la calma posible y la hostilidad no seria una jugada muy inteligente llegados a este punto.
Mi rey, Brynden...mi padre no te traiciono, esta en un estado en el usted podria obligar a todo Westeros a movilizarse saltando y alabando a los dioses de su agrado, que a el poco le importaria. Y sinceramente, si me lo permite, yo tambien quiero ver sangre, pero de la persona que se haya tomado el infame atrevimiento de hacerse pasar el con fines claramente de generar hostilidad en nuestra familia. Muchos han sido los que han mostrado su descontento ante su renuncia al trono, muchos les han dado la espalda incluso. No dudaria ni por un instante que sean capaces tambien de mas. Aunque he de admitir que me averguenza un poco decirlo fuera de mi hogar...lo cierto es que temo que mi padre pierda lentamente la cordura yo...lo he escuchado hablando por las tardes con mi hermano...Glacyus, a veces creo que una parte suya ha quedado detenida en el tiempo...Por favor le ruego, no nos apresuremos a sacar hechos y conclusiones. Evidentemente hay alguien que sacaria un buen provecho si se deshace del señor del Bastion de las Tormentas y no sabemos a cuantos perjudicarian si lograran su propósito....pero no tengo nada que ocultar, así como tampoco lo tienen mis padres ni mis hermanos, por eso accederé a su petición, y pido teniéndolo a usted, Rey Brynden Baratheon a su madre la reina Meridia Martell-Baratheon y a su guardia como testigos, que traigan a mis padres ante usted por...presunta... traición.
Las ultimas palabras quemaron como fuego liquido en sus venas y dolieron profundo en su corazón, cortando y destruyendo lo poco que le quedaba. Negarse a su petición era una condena segura, no solo para sus padres, sino para todos ellos. Si accedía, al menos tenían una mínima posibilidad. Confiaba en que al ver a su padre y su estado deplorable el asqueroso idiota que respondía por rey tendría un rapto de lucidez y comprendería que efectivamente era inocente. Logro mantenerse en pie, porque algo dentro de ella era lo suficientemente fuerte como para sostenerla.
Tengo la esperanza de que al verlo en persona, usted comprenda que efectivamente estamos hablando de un hombre enfermo y disponga de una investigación apropiada y la justa condena para el verdadero traidor.
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| | | Admin Admin
Mensajes : 42 Fecha de inscripción : 06/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Sáb Oct 29, 2011 1:08 am | |
| Brynden escuchó el discurso de su tía casi con disgusto, casi por necesidad, aguardó unos instantes, expectante y se dejó caer sobre el trono de hierro ligeramente aburrido, hasta que se levantó de un tirón tras clavarse una punta en la parte baja de la espalda. Intentó mantener una expresión serena pero un pequeño quejido escapó de sus labios, se había hecho una herida menor pero que le tendría en vilo el resto de la sesión. Todo este tema hizo que su humor se tornara más agrio y más propenso a la violencia.
-¿Que no está enterado? Pues no supongo cómo puede un traidor “no estar enterado” de su propia traición, querida tía. ¿Puedo suponer que lo defiendes?
Tarec, la araña, se adelantó—Mi señora, puedo comprender que queráis defender a vuestro amado padre, yo habría hecho lo mismo si tuviera un padre, al menos uno que no me entregara a los esclavistas para ser castrado y vendido, pero… —hizo una pausa dramática— Estoy seguro de que la lógica se sobrepondrá a todo esto y no dudará de las órdenes de nuestro amado rey. Lo más probable es que todo sea un malentendido y una vez su padre llegue a aquí todo sea resuelto, conversado, y terminemos todos felices y contentos—dijo, con su característico tono de voz peligrosamente conciliador.
El rey volvió a intervenir—Dudo seriamente de que haya renunciado a su puesto como acto de caridad y buenas maneras. Es todo un estratagema, estoy seguro—dijo pensativo—. No sé… Yo no lo veo muy deprimido. ¿Qué opináis vos, Ser Mortymer?
-Yo le veo bastante cuerdo como para escribir algo así y sobre todo bastante acusativo.
El capitán de la guardia de la ciudad entró a través de las puertas de Hierro del Salón del Trono, llevaba consigo un pergamino, llegó hasta el niño rey y se arrodilló—Mi señor…—observó a Brynden con ojos que buscaban una confirmación a lo que el rey respondió con gesto afirmativo, el capitán de la guardia, cuyo nombre era ser Morys Tarth, se acercó a Aedin y le tendió una pluma para que firmara el pergamino, era la orden de captura de su padre y su madre.
<< Lo más probable es que todo sea un malentendido y una vez su padre llegue a aquí todo sea resuelto, conversado, y terminemos todos felices y contentos>>, era lo que debía de resonar en la mente de la joven Aedin.
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| | | Aedin Baratheon Casa Baratheon
Mensajes : 31 Fecha de inscripción : 15/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Miér Nov 02, 2011 11:34 pm | |
| Arrugo su ceño con incredulidad cuando escucho escapar de labios del rey un leve gemido de dolor que no pudo contener. Intercambio una mirada con su cuñada, que no dejo entrever el odio y la repugnancia que le significaban que un niño que no sabia ni contener un sollozo ante una herida menor, tuviera en sus manos la vida de todos en los Siete Reinos. Las palabras que escupió a continuación no hiso mas que remarcar ese odio y por una vez se alegro de la interrupción que hiciera Tarec, puesto que por una fracción de segundo había sido tentada a olvidar las diplomacia y su lugar para estrangularlo con sus manos, aunque en el suelo real se derramara luego su propia sangre. Agacho la cabeza y cerro sus ojos, tragándose en silencio, con dolor, su orgullo y el resentimiento que se anudaban en su garganta como una serpiente venenosa.
Pido perdón su Majestad, si mis palabras lo han ofendido. Solo pretendía que se tomaran en cuenta todas las posibilidades.
Dirigió a la araña una mirada de soslayo que el rey no percibió e hiso un gesto de agradecimiento con su cabeza, apenas perceptible. Las palabras de Ser Mortymer la quemaron por dentro y odio con todas sus fuerzas al Lannister. Puede que no fuera tan fácil llegar al rey, pero algún día ella se cobraría aquella ofensa de su parte. Le dirigió una mirada fría de arriba abajo y guardo silencio. Las cosas caerían en su lugar a su tiempo y con paciencia.
Como dije mi rey, no tenia conocimiento alguno de la carta que se me esta presentando, no defiendo a nadie, solo expongo todos los puntos. Nuevamente me disculpo.
Estuvo tentada de echar una mirada a la puerta, con la esperanza de ver llegar a alguno de sus hermanos a su lado, pero se contuvo de hacer cualquier acto que pudiera ser calificado de sospechoso. Allí en Desembarco y mas aun en la sala del trono, uno debía ir con pie de plomo. El capitán trajo un pergamino para que el niño aprobara y ella comprendió con un nudo en su estomago de que se trataba. Tomo la pluma que ser Morys Tarth le entregara y respiro hondo leyendo y releyendo la hoja que se le presentara. No era mas que un mal entendido. Todo se trataba de un malentendido y sus padres la perdonarían por causarles las molestias de tan largo viaje para ver la asquerosa cara de Brynden. Todo se trataba de un mal entendido. Con mano temblorosa llevo la pluma a la hoja y firmo. Fue la sensación mas amarga y extraña de toda su corta vida. De alguna manera, sintió como si hubiese pactado con alguna deidad maligna a cambio de su propia vida. De alguna manera, le había entregado su alma a Brynden y de algo estaba segura, el la destrozaría. Con la pesadez de la condena de sus padres reflejados en unos ojos azules que ya no se preocupaban por parecer seguros de ellos mismo, volvió la mirada nuevamente hacia Brynden. Detrás suyo murmullos inentendibles recorrían la habitación y un poco mas adelante el odio se le transformo en veneno al notar la sonrisa satisfactoria de Mortymer Lannister.
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| | | Admin Admin
Mensajes : 42 Fecha de inscripción : 06/10/2011
| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] Dom Nov 06, 2011 4:49 am | |
| Morys observó firmar a la joven Baratheon y no pudo evitar sentir compasión por ella, aceptó la pluma nuevamente cuando ella acabó, comprobó la firma y cerró el pergamino unos instantes hasta que se dirigió al trono de hierro, hacía Bryden.
-Su majestad…-Dijo tímidamente extendiendo el papiro nuevamente para que su alteza firmara la orden de captura.
La sonrisa de Brynden ahora se mostró sínica, y con un tono marcado por el sarcasmo y de seguir hiriente y humillante para su señora tía dijo lo siguiente mientras su real firma se plasmaba en la orden de captura que traería ante la corte a su propio abuelo: -Qué la justicia del Rey se haga –Apenas terminó de decirlo carcajadas salieron de sus labios que se veían enrojecidos.
Lannister hizo una seña con sus manos para que unos sirvientes alcanzaran a su majestad su sello real…
El cambió su mirada de divertida a seria en un segundo y presionó con fuerza el papel marcando al Venado Coronado en el papel…
-¡Me recordarán como el Rey que limpió a su propia dinastía de corrupción y maldad! ¡Los bardos me amarán! –Dijo en voz alta, parecía como si todo fuese un juego para él, para le pesar de Aedin es muy posible que así lo fuera…
-¡El Rey Inquisidor! ¡El Juez de la Tormenta! –Se regodeaba ante los posibles apodos que los Bardos le darían, que creía que le darían. Ya estaba harto de que le llamaran “El Rey Niño”. No era uno, era tan hombre como cualquiera, era más hombre que cualquiera y se los demostraría.
Se levantó del trono de repente.
“Quiero descansar”-Dijo caminando hacía su tía, le sonrió casi tiernamente, y la besó en la parte inferior de su mejilla, cerca de sus labios –Es bueno saber que de momento no eres una traidora, querida tía…y recuerda La Furía es NUESTRA –Dijo resaltándole a Aedin que él era tan Baratheon como ella, como Rickard, como Thomas, como sus propios abuelos a los que juzgaría por traición.
“Pueden irse todos” –Dos de sus sirvientes se apresuraron a seguirlo a sus aposentos, ni siquiera dirigió palabra o mirada a su madre. Se sentía muy ofendido con ella.
¿Tan difícil era hacer a un Rey Feliz?
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| Tema: Re: Sangre de mi sangre [el rey] | |
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| | | | Sangre de mi sangre [el rey] | |
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